17 de febrero de 2009

Bilis.

Andaba fumando y pensando cómo voy a salir de ti si aún no he entrado.
Dije, sobriamente hablando, que salir implicaría un deseo que yo no deseo.
Y si no reivindico, me quedo coja.

Me arde tanto, tantísimo, como me devora. Y tanto, o menos, como me revuelve.

Hace falta mucha patada en la tripa para expulsar esta bilis.



Por tu huesos loco de remate.
Todos los molinos se convierten en gigantes.


-Fito&Fitipaldis

2 comentarios:

Ricardo Tribin dijo...

Amiga muy querida,

Esto lo la bilis es muy duro.

Te dejo un gran abrazo...

Anónimo dijo...

Ay cariño...!
la bilis de la angustia,
la bilis del desamor...
esa puta bilis amordazándonos la esperanza...
¡Fantástica, como siempre!