28 de julio de 2009

Raciocinios.

Y entonces tú, fantasmagóricamente despierto, resuelto, deambulando para con mi eternidad,
te levantaste y entrometiste en raciocinios,
ingenuo. "Desordénalos".
Y entonces tú, alegóricamente desestabilizador,
los desordenaste.
Ingenuo. "Tuyos".



Yo estaba condenado por la luz saliente de sus ojos.
Ella habló con una voz que trastornó el cielo.
Dijo "Ven aquí a la sombra amarga,
te estrecharé entre mis brazos y sabrás que te has salvado".
Déjame firmar, déjame firmar,
no me puedo enfrentar al diablo así que solamente déjame firmar.


-Robert Pattinson




Gracias por los comentarios y demás en eso de

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Con lo genial que es el Caos ordenado.
Ahora lo entiendes.
=)

Anónimo dijo...

Con lo genial que es el Caos ordenado.
Ahora lo entiendes.
=)

Anónimo dijo...

Tienes un estilo único y maravilloso.
estupendo.
pero ya tu lo sabías.

un abrazo.

Unknown dijo...

una sonrisa más, me encantó lo que leí...

Deprisa dijo...

Me gusta la lírica del poema, y como encaja con el otro que propones. Es hermoso :-)