3 de abril de 2009

Novum sub sole.

Quiero decir,
de entre el asilo de las penas viejas y charlatanas, ansiosas por alardear de batallitas pero tan, tan huecas de corazón, y el nuevo poniente austero e hipócrita de libertad enferma por ser clausurada y querida, apareciste tú.

A lo mejor
putrefactos los sueños escandalosos de un no viene ni vendrá, reventó la segunda cuerda hiriendo de muerte la canción que se tocaba, allá asustando a la esperanza, y por mera y clásica supervivencia, apareciste tú.

De todas formas,
con la misma carne trémula, el mismo xilofón de goma, un cartel de Welcome para asegurar la divina inteligencia, y, si no recuerdo mal, un interés desinteresado por interesarme por tu interés, tan interesante, apareciste tú.

Cuando nihil novum sub sole, apareciste tú.



El amor hace daño,
pero a veces es un buen dolor
y me hace sentir como si estuviera vivo.


-Incubus

2 comentarios:

Allek dijo...

te dejo algo mas que una sonrisa...

Anónimo dijo...

La vida es tan cíclica
que las nuevas apariciones son las que le dan color.

Cuando no hay nada nuevo bajo el sol,
cuando solo está el monotonismo de los mismo, que va y viene, que se revuelca, que se retuerce, que atormenta, tal vez, entonces aparece esa persona.
El final de la historia no importa,
lo que importa es que apareció.

Me identifico.
saludos.